Hoy he tenido una conversación de lo más surrealista. He atendido a un contacto de Logorapid (nuestro estudio de diseño gráfico) interesado en el diseño de un logotipo. Algo que identifique bien a su empresa, le dé buena imagen, etc. Lo habitual y normal, lo que se espera de un buen logotipo.
Quedamos en aplicar el Plan Profesional, en el que ponemos a un equipo de tres diseñadores a analizar su caso y elaborar propuestas entre las que escoger. Todo correcto.
Ahora viene lo bueno: este hombre, con la mayor naturalidad, pretendía que nosotros hiciéramos todo este trabajo (análisis, investigación, brainstorming y elaboración de propuestas) sin adelantar ni un céntimo, y sin haberse comprometido a nada.
Es decir, nosotros le mandamos las propuestas, y si le gusta alguna, entonces nos hace el pedido.
¿A alguien se le ocurriría pedir esto, por ejemplo, a un pintor?
Usted empiece el trabajo y haga un par de habitaciones. Si me gusta, ya le pagaré. Si no, adiós muy buenas.
Pues adiós, muy buenas. Clientes como estos, mejor que se vayan a comprar a la competencia.
El problema es que hay empresas o profesionales que a lo mejor están dispuestas a hacerlo. Lo que no quiere decir que lo hagan bien ni el resultado sea bueno… pero tampoco quiere decir que el resultado será malo.
Iniciativas como 12designers (http://www.12designer.com/ en España y otras cuantas en Estados Unidos promueven este tipo de relación entre cliente y proveedor. No las critico en un 100% ya que me parece una excelente oportunidad para que estudiantes y profesionales que recien comienzan trabajen sobre briefs y necesidades reales de clientes, pero me parece mal que los clientes se acostumbren a esta forma de trabajar.
Te dejo esta URL por si quieres coger la bandera del NO!SPEC en España http://www.no-spec.com/
saludos,
Andrés
Andrés, no conocía esta web y me parece una iniciativa excelente.
Sobre el crowdsourcing, es útil en muchos casos, pero no en diseño profesional. No es un trabajo colaborativo, ni aparecen soluciones creativas (no hay tiempo ni incentivos para hacer un análisis real), y como modelo económico no se aguanta. Al final no es más que una manera de conseguir un trabajo mediocre (normalmente) por cuatro céntimos.
Es curioso que la mayoría de diseñadores hayan probado el crowdsourcing, y lo acaben dejando todos.
Bueno, de hecho no es curioso, sino inevitable.
Te sorprenderías de la cantidad de emails que recibimos para obtener «publicidad gratis» en los websites que gestionamos. Si, ya se que no es lo mismo, pero la filosofía del «gratis y sino no» está especialmente presente en las IT.
Como dices, nadie pide ni espera muebles gratis de IKEA, o una reparación gratis del coche en la SEAT, pero si un informe de optimización SEO o anunciar sus productos en un Portal Vertical….incluso un logotipo nuevo !!